"La meticulosidad conduce a menudo a la tiranía" (Rudolf Allers)



viernes, 22 de abril de 2011

BLUE

Esta es la primera entrada que escribo directamente en el blog. No soy un blogero, esa es la verdad. Pero no por eso tienen menos urgencia estas letras. Están sonando de fondo los Jayhawks, eso demuestra que no miento.

Era sólo para decir algo que mi garganta barrunta hace unos cuantos meses. La verdad --quiero que todo el mundo sepa que cuando digo la verdad es que quiero decir la verdad-- pues eso, que la verdad está escrita en las paredes del baño del Templo del Gato.

Todo el mundo sabe que alguien con un par de copas de más es alguien sincero. Pues imaginémosle con un bolígrafo, un cigarrillo y una pared de cuatro metros cuadrados o algo más delante de sí. Tantos baldosines en los que escribir.

Tantos años y nunca me había puesto nada. Es la pintada que más me pone los pelos de punta. Me parece tremendo que alguien selle de esa manera la primera esnifada de su vida. Otra pintada habla de Lorca. Otra es una oda a la amistad, otra a la necesidad de sentirse vivo (eso me parece cuando la leo), otra es un chiste fácil. Otra es un violín. Sí, que pasa, es un violín.

Esta noche he invitado a una chica a que entre en los baños del Templo del Gato. Al de los tíos. Le ha gustado más que el de las chicas. Sé que tiene razón. He entrado allí, me ha invitado. Ha sido bonito ese intercambio de intimidades.

Esta noche se acostará sabiendo que la verdad está escrita en la paredes del baño de los tíos del Templo del Gato. Yo he estado allí. Y me gustan los Jayhawks. Algún día escribiré el estribillo de Blue en esas paredes. De verdad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay otros baños (o había... esto de perder las buenas costumbres...) tapizados de verdades: El Only You. Podemos repetir la incursión cruzada y esta vez igual la sorpresa la damos nosotras!
Me gusta esta faceta blogera de compartir.
mmmmuuaaa!
E.

Anónimo dijo...

por cierto, hay en malasaña un sitio, el ojalá, con terracita y arena de playa en la planta baja... y respecto al tema que nos ocupa, con tizas en los aseos para escribir sobre las paredes negro-pizarra. El resultado: pensamientos de baño efímeros animados por el dueño.
E.